Los cabos de amarre. Maniobra 1
Las embarcaciones se amarran a un
muelle o pantalán por medio de cabos potentes conocidos como amarras. Podemos
definirlas como: Los cabos que se emplean para amarrar un barco a un muelle,
pantalán u otro barco, al objeto de que no se desplace en cualquier sentido.
Reciben el nombre de cabos, entre
la gente marinera, las cuerdas o sogas que se tienen a bordo del buque (Como
chascarrillo, a bordo la única cuerda es la del reloj).Bajo el nombre de
amarras, por tanto, se designan los cabos o estachas que sirven para afirmar el
buque al atraque.
Se denominan estachas en general
a las amarras utilizadas en los atraques y en los remolques, y son cabos de un
grosor considerable.
Las amarras reciben un nombre
distinto según la dirección en la que trabajan al salir del buque por la guía o
por la gatera.
Pueden ser: Largos, Springs, Traveses Coderas.
LARGOS:
Son las amarras que saliendo por la proa o por la popa
trabajan hacia proa o hacia popa respectivamente. Trabajan hacia la misma
cabeza de aquella por la que salen. Los largos de proa trabajarán hacia proa y
los largos de popa trabajarán hacia popa.
Se usan para colocar o situar el barco en una posición
inicial y se dan lo mas lejos posible (lo más en largo posible) hacia delante o
hacia atrás respectivamente. Sirven para mantener el buque pegado al atraque y
fundamentalmente para evitar los desplazamientos longitudinales del mismo. Por
lo tanto, el largo de proa evitará que el buque se mueva hacia popa y el largo
de popa evitará que se desplace hacia proa.
Portando del largo de proa, nos hace avanzar la proa y nos
aconcha la amura hacia el muelle. Así mismo portando del largo de popa, avanzaremos
hacia popa y aconchará la aleta hacia el muelle.
SPRING:
Son las amarras que saliendo por la proa o por la popa
trabajan hacia popa o hacia proa respectivamente, es decir trabajan hacia la
cabeza contraria de aquella por la que salen. Los springs son las amarras que
se colocan en diagonal. Actúan de forma parecida a como lo haría un muelle, de
ahí su nombre (en inglés spring significa muelle, entre otras acepciones). Uno
de los springs parte de la proa del barco en dirección a popa, hasta alcanzar
el punto de amarre, situado sobre el muelle, pantalán u otra embarcación, a la
altura de la popa; el otro spring parte de la popa en la forma contraria.
Son los que se utilizan para dejar el barco parado y en
posición. Su principal misión evitar los movimientos longitudinales del barco
cuando está atracado. De esta forma, el spring de proa evitará que el barco se
desplace hacia proa y el de popa evitará que se mueva hacia popa.
Portando del spring de proa , esta aconcha hacia el muelle
y lleva hacia atrás el barco. Portando del spring de popa aconcha la popa hacia
el muelle y hace avanzar el barco hacia proa.
TRAVES:
Son amarras que trabajan perpendicularmente al plano
longitudinal del buque. Se utilizan para dejar el barco pegado o aconchado al
lugar de amarre. Como misión evitan que el barco se despegue de su atraque,
evitan el movimiento transversal del barco con respecto a su atraque.
CODERA:
Se llama codera al cabo que firme a proa y popa sirve para
amarrar el barco a una boya o a un
barco, por el lado contrario al muelle donde estamos
atracados, y, aproximadamente en la perpendicular de los puntos de partida.
La finalidad de las coderas es aguantar el barco, cuando
hay mal tiempo, y evitar que golpee contra el muelle. Se emplean para
desatracar, halando de ellas, cuando el viento viene de la mar.
Se deben dar con un bote, y, por seno, para facilitar la
salida del barco (dar por seno es dar la amarra de tal forma que los dos
chicotes queden a bordo, una vez pasados por el noray o la argolla).
Como recopilación de todo lo comentado en los artículos
anteriores podemos considerar:
Los largos sirven para situar el barco y los springs para
que no se mueva. Al portar de las amarra las fuerzas que hacen atracar la proa
hacen desatracar la popa y viceversa. Los traveses de proa y popa mantienen los
extremos del barco aconchados, en especial al cargar la embarcación. Los largos
deben de tener una longitud igual a la eslora del buque, y se procurarán dar
los más alejados que se pueda del barco (en dirección a la eslora) para que los
ángulos sean lo mayor posible y, por tanto, aumenten las fuerzas de atraque
hacia el muelle.
Al dar las amarras habrá que tener en cuenta la amplitud de la marea del lugar. Una buena longitud para los largos sería tres veces la amplitud de la marea; para los springs bastará con vez y media dicha amplitud.
Las amarras hay que protegerlas de la humedad, del uso,
del sol y de todos los agentes externos en general, y en especial del roce de
la amarra contra el amarre al moverse el buque por el paso de otros buques o
por el efecto de la resaca. Se consideran dos puntos importantes por los que
sufren las amarres debido al roce: en la gaza y en la parte del cabo que roza
con las gateras. Para evitar en lo posible estas contactos, se forran las zonas
conflictivas con lana, sacos a bien cuero y, últimamente con trozos de manguera
de longitud y diámetro adecuados.